El eneagrama es una poderosa herramienta de autoconocimiento y desarrollo personal que ha ganado popularidad en el mundo de la psicología y el coaching. Pero el eneagrama es mucho más que eso. En este articulo pretendo despertaros la curiosidad para ir más allá de verlo como una simple herramienta de conocimiento de la personalidad.
Para ello vamos a hacer una diferencia entre el eneagrama como símbolo y el eneagrama de la personalidad.
EL SÍMBOLO DEL ENEAGRAMA
Se desconoce el origen real del símbolo del eneagrama, aunque si se sabe que su origen se remonta a hace más de 3000 años a.c. El eneagrama, originado en las tradiciones espirituales y filosóficas antiguas, tiene componentes del judaísmo místico, el cristianismo, el islam, el taoísmo, el budismo y la filosofía griega ancestral, en particular la de Sócrates, Platón, y los filósofos neo platónicos. Este símbolo desvela un conocimiento universal sobre las leyes fundamentales que determinan los procesos de creación, manifestación y administración del universo.
Estas leyes universales son principios inmutables que dan origen a todo lo que existe en el universo. Nada esta hecho al azar, todo está sujeto a ellas y aunque sean desconocidas para un individuo, esto no le exime de la misma, por tanto podemos comprobar su existencia en todos los sucesos que se manifiestan en nuestro entorno. Si tu existencia en este mundo está regida por unas leyes, y no me refiero a las leyes creadas por el hombre, ¿no te gustaría saber como funcionan?
Recordemos la famosa frase del cientifico Albert Einstein:
“Dios no juega a los Dados”
EL ENEAGRAMA DE LA PERSONALIDAD
El eneagrama de la personalidad es un sistema que identifica nueve tipos de personalidades principales, cada uno con sus motivaciones, deseos y miedos únicos. Propone trabajar sobre uno mismo, con el objetivo de convertirse en una persona virtuosa, superando “las máscaras” de la personalidad.
En 1920 George Ivanovich Gurdjieff introdujo el eneagrama en Europa. Gurdjieff estaba convencido de que había una ciencia antigua capaz de transformar la psique humana pero que estaba perdida, por lo que se dio a la tarea de realizar investigación en todo tipo de sabiduría antigua sobre los diferentes sistemas de pensamiento antiguas y sus tradiciones con ayuda de un grupo llamado Buscadores de la Verdad (SAT: Seekers After Truth) y viajaron por diversos países de medio oriente compartiendo sus diferentes experiencias. Al parecer en algún lugar de Afganistán o Turquía Gurdjieff encontró el símbolo del eneagrama.
Fue Oscar Ichazo (alumno de Gurdjieff) quien llevó el eneagrama a América y su alumno Claudio Naranjo fué el responsable de integrar el eneagrama a la psicología moderna como un método para su uso en el desarrollo personal y espiritual, logrando ayudar al individuo a encontrar el camino de vuelta al equilibrio emocional, mental e instintivo.
LOS NUEVE TIPOS DE PERSONALIDAD
El eneagrama de la personalidad ofrece una clasificación de nueve tipos distintos, conocidos como eneatipos. Cada uno de estos tipos representa las diferentes máscaras o patrones de comportamiento que adoptamos para enfrentar los desafíos de la vida.
Estos comportamientos, aprendidos a lo largo del tiempo, son influenciados por nuestras experiencias, educación, creencias y emociones. Desde bien niños, buscamos actuar de formas que nuestro entorno nos brinde aceptación y amor, y evitamos aquellas que despiertan nuestras propias inseguridades.
Este sistema de defensa se arraiga en nosotros a lo largo de nuestra vida, dando forma a la imagen que proyectamos al mundo y a nuestros comportamientos, reflejando nuestra percepción individual de la realidad.
Cada tipo tiene una motivación básica y una serie de rasgos de personalidad asociados. Sin embargo, la identificación en muchas ocasiones se complica puesto que es importante tener en cuenta que todos tenemos un poco de cada tipo dentro de nosotros, aunque uno de ellos es el que nos domina.
También hay otros factores que suponen un problema para reconocerse dentro de algún tipo debido a factores como, el bajo nivel de autoconocimiento de la persona, la imagen idealizada de uno mismo y definir la identidad propia según lo que los demás piensan.
Veamos ahora el enfoque principal de cada eneatipo:
Eneatipo 1: Orientado hacia el logro y la perfección, tiende a ser crítico consigo mismo y con los demás.
Eneatipo 2: Se enfoca en ayudar a los demás, a menudo sacrificándose a sí mismo en el proceso.
Eneatipo 3: Ambicioso y orientado al éxito, busca reconocimiento y admiración.
Eneatipo 4: Valora la autenticidad y la autoexpresión, a menudo luchando con sentimientos de diferencia e incomprensión.
Eneatipo 5: Analítico y reservado, tiende a mantener distancia emocional y buscar conocimiento.
Eneatipo 6: Comprometido y responsable, a menudo lucha con la ansiedad y la preocupación.
Eneatipo 7: Optimista y aventurero, busca la excitación y nuevas experiencias.
Eneatipo 8: Dominante y protector, valora el poder y el control.
Eneatipo 9: Tranquilo y conciliador, busca la armonía y evita el conflicto.
APLICACIÓN DEL ENEAGRAMA EN LA TERAPIA Y EL COACHING
El eneagrama es una herramienta versátil que puede aplicarse de diversas maneras en el contexto terapéutico y de coaching, brindando beneficios tanto para los clientes como para los profesionales.
Terapia
En el ámbito terapéutico, el eneagrama puede ser una herramienta invaluable para ayudar a los clientes a comprender mejor sus patrones de comportamiento, pensamiento y emoción. Al identificar el tipo de personalidad dominante de un cliente, el terapeuta puede explorar cómo estos patrones afectan sus relaciones interpersonales, su autoimagen y sus respuestas emocionales.
Una de las principales fortalezas del eneagrama en terapia es su capacidad para proporcionar una comprensión holística de la persona. Más allá de simplemente diagnosticar un trastorno o problema específico, el eneagrama ofrece una visión más completa de la personalidad del cliente, incluyendo sus motivaciones subyacentes, miedos, defensas y puntos ciegos. Esto permite al terapeuta abordar las raíces profundas de los desafíos del cliente y trabajar hacia una transformación más duradera y significativa.
Además, el eneagrama puede ser útil en el proceso de establecer metas terapéuticas y diseñar intervenciones personalizadas. Al comprender los patrones de comportamiento y las motivaciones del cliente, el terapeuta puede colaborar con el cliente para identificar áreas de crecimiento personal y desarrollar estrategias efectivas para alcanzar sus objetivos.
En resumen, el eneagrama en terapia ofrece una vía poderosa para la autoexploración, el autoconocimiento y el crecimiento personal. Al proporcionar una comprensión más profunda de la personalidad del cliente, el eneagrama puede ayudar a los terapeutas a facilitar un cambio positivo y duradero en la vida de sus clientes.
Coaching
En el ámbito del coaching, el eneagrama también puede ser una herramienta valiosa para ayudar a los clientes a alcanzar sus objetivos personales y profesionales. Al identificar los patrones de comportamiento y las motivaciones del cliente, el coach puede ofrecer una perspectiva única sobre cómo superar obstáculos, maximizar fortalezas y aprovechar el potencial no realizado.
Una de las principales aplicaciones del eneagrama en coaching es su capacidad para mejorar la autoconciencia y la autorreflexión. Al comprender su tipo de personalidad y los patrones que lo impulsan, los clientes pueden identificar áreas de desarrollo y establecer metas claras y realistas para el crecimiento personal y profesional.
Además, el eneagrama puede ser útil en la mejora de la comunicación y las relaciones interpersonales. Al comprender los estilos de comunicación y las preferencias de interacción de cada tipo de personalidad, el coach puede ayudar al cliente a mejorar sus habilidades de comunicación, resolver conflictos y construir relaciones más sólidas y significativas.
El eneagrama en coaching ofrece una herramienta poderosa para facilitar el cambio y el crecimiento personal. Al proporcionar una comprensión más profunda de sí mismos y de los demás, los clientes pueden trabajar de manera más efectiva hacia sus objetivos y alcanzar un mayor éxito y satisfacción en sus vidas personales y profesionales.
CONCLUSIÓN
Podemos concluir diciendo que el eneagrama es una herramienta valiosa para terapeutas y coaches que desean mejorar la eficacia de su práctica y ayudar a sus clientes a alcanzar su máximo potencial. Al comprender los fundamentos del eneagrama y su aplicación en la terapia y el coaching, los profesionales pueden transformar su enfoque y obtener resultados más significativos para ellos y sus clientes.
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Juncal Ruiz Prado
Terapeuta Transpersonal y Mindfullness
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